El agua hace florecer la tierra

Quien no se desea a sí mismo, en el fondo, ya solo aspira a ser deseado por el deseo del otro. En vez de universalizar esta íntima experiencia, y aceptar esta degradante verdad, creemos míticamente que lo que no tenemos nosotros, algunos otros sí lo tienen.

La reacción de la mujer es tu espejo

Me sentí atraída en poder interactuar en la plática, un año antes había asistido a una reunión de este grupo. En la cual me la pasé muy a gusto, conversando sobre las tantas cosas que habíamos hecho en nuestras vidas tras aquel curso de liberación sensible.